Cerdán dimite como número tres del PSOE y entregará el acta de diputado

Cerdán ha estado a las 13:00 horas en Ferraz tras pasar la mañana en el Congreso de los diputados, donde se le ha podido ver en su escaño leyendo unos documentos incriminatorios que han dejado demudada a buena parte de la formación, y después se ha desplazado a la Moncloa para reunirse con el presidente del Gobierno.

Hasta minutos antes de que se levantara el secreto del sumario y el auto estuviera a disposición de cualquiera, el ya exdirigente socialista había estado negando pública -y, según aseguran, también privadamente- que fuera posible encontrar nada en su contra.

Anoche, cuando ya trascendió que la investigación aportada por la UCO al juez incluía audios grabados por Koldo García en los que podía oírse al asesor del exministro de Transportes José Luis Ábalos, al propio ministro y a Cerdán hablar del dinero que se les debía por varias licitaciones, la dirección del partido emitió incluso un comunicado rotundo de cierre de filas. Por eso el desconcierto entre sus compañeros de bancada y de ejecutiva e incluso entre miembros del Ejecutivo era absoluto.

Noticias relacionadas

El mensaje de Cerdán a Koldo sobre el amaño en las primarias que ganó Sánchez: «Apunta que han votado y mete las dos papeletas»

Koldo amenazó a Santos con destapar secretos de Sánchez: «Él me pidió unas cosas»

Los ocho audios de Koldo que acorralan a Cerdán y las adjudicaciones bajo sospecha

Sumar y Podemos exigen al PSOE el cese de Cerdán y que entregue el acta de diputado

«Estoy desolado», comenta un miembro de la ejecutiva. «Me siento violado». La sensación está muy extendida. Fuentes del Ejecutivo aseguran, después de haber hablado con Pedro Sánchez, que el propio presidente del Gobierno está en «shock». Hace apenas tres semanas que salió en su defensa, desde la tribuna de la Cámara baja, durante una sesión de control en la que acusó a Alberto Núñez Feijóo de entretenerse con «casquería» y «difamar a personas honestas». « «No damos crédito», dice en alusión a sí mimo y al presidente un ministro.

La incertidumbre es total y la duda ahora es si la salida de Cerdán bastará para calmar las aguas. Ya hacía semanas que algunos cuadros del partido hablaban de sensación de fin de ciclo que sólo podría ser resuelta con cambios drásticos en la dirección del PSOE y una crisis de Gobierno. Ahora ese estado de ánimo se ha agudizado.